El contacto es esencial para nuestro desarrollo y bienestar. Tu beauty advisor te anuncia que su servicio de findes del masaje a cuatro manos está de promoción especial hasta finales del mes de enero. Una delicia para los cinco sentidos de 60 minutos de duración a 50 euros.
Una vez lanzada la oportunidad de tener una maravillosa experiencia os paso a contar como enfocamos en Valle Estética una sesión de masaje. El masaje es la forma elaborada y terapéutica de contacto que utilizamos los profesionales para ayudar al cuerpo a aliviar sus malestares.
Un buen masaje nos debe estimular el cuerpo de una manera agradable y placentera, respetando completamente su funcionamiento, sin invadirlo ni obligarlo, sino invitándole a que colabore. Un buen masajista sabe esto.
A mi entender el efecto primordial del masaje se debe centrar en tratar los dos aspectos más importantes de nuestro ser, el espiritual- psique y el orgánico, potenciando el equilibrio entre ambos.
Durante el masaje suceden innumerables cambios placenteros y saludables en el cuerpo. Todos ellos aparecen tras el alivio de la tensión y la relajación de los tejidos. Las molestias y el dolor se minimizan. La relajación se instaura en el cuerpo de una manera agradable y profunda.
Desde aquí la mente puede acceder con más facilidad a un estado profundamente relajante, casi meditativo donde se “recoloca”. Se restablece así una comunicación fluida entre cuerpo-mente y viceversa. Todo esto se traduce en un mayor beneficio que favorece que la mente encuentre fácilmente la auto sanación para el cuerpo.
Esto constituye un doble beneficio del masaje que generalmente ocurre sin que podamos remediarlo porque nuestro “ser” es muy sabio.
Por supuesto, el profesional masajista, es el que con su tacto y conocimientos sabe “encender estos interruptores” para que estos milagros ocurran. Es él que conduce estos procesos para hacer de nuestra experiencia de masaje algo extraordinario.
Todo esto es lo que puede ofrecer un buen masaje y quiero invitarte a que lo experimentes en mi centro.
Por todo ello, como profesional y además como consumidora, concluyo que con el masaje entre otros aspectos:
– Se refuerza la capacidad natural de auto curación del cuerpo frente a enfermedades, aumenta la eliminación de toxinas, elimina bloqueos energéticos y nos libera de tensión y dolor muscular.
– Alcance de un nivel de relajación físico-mental elevado que perdura en el tiempo. Propicia además que nuestro sueño sea profundo y reparador.
– Aumenta la resistencia corporal frente a infecciones y dolencias, ya que en los estados placenteros nuestra hipófisis secreta una serie de sustancias que refuerzan nuestro sistema inmune.
– El masaje Fomenta una imagen positiva del cuerpo, ya que este agradece que te ocupes de él de una forma tan grata.
– Ayuda a reconciliarse con uno mismo, a reconocer nuestro cuerpo como nuestro, a ubicarnos en él, a comprenderlo y auxiliarlo de sus malestares, sus rigideces, sus bloqueos. ¡Nos ayuda a entender que nuestro cuerpo es nuestro mayor tesoro!
– Ayuda a recuperar la memoria corporal tanto si se ha sufrido un trauma, enfermedad, dolencia o como si nos encontramos sanos. Esto es muy importante para personas que tienen mermada la funcionalidad física.
– Complementa y prolonga extraordinariamente los beneficios de cualquier tipo de gimnasia o técnica de trabajo corporal y es absolutamente indispensable para los que practican deporte más de dos veces por semana.
Como profesional del masaje y como consumidora de ellos os animo a que añadáis esta forma tan placentera de cuidado a vuestra rutina de salud y os aseguro que sentiréis un gran cambio en vuestra vida.